Se me mostró un molino de viento. Hacía mucho viento y las aspas giraban a gran velocidad. De pronto cesó el viento y las aspas dejaron de girar, porque dependían totalmente del viento para moverse. Y escuché estas palabras:
"No pongas tu seguridad en las cosas de esta vida, sino en Mí, fuente de todo poder y de toda fuerza en la profundidad de tu ser".
Es que si no amb posés a les mans de Nostre Senyor, no tindría forces per poguer fer moltes coses, com el voluntariat.
ResponderEliminarUna abraçada, Montserrat.
Meillä Suomessa on paljon vanhoja tuulimyllyjä...
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