"Se me mostró un campo de trigo a punto para la cosecha. Y escuché estas palabras:
- Hay un tiempo y una estación para cada cosa. No dejes para mañana lo que sabes que tienes que hacer ahora; fluye, pero, al ritmo de toda la vida y permanece en la paz perfecta".
Buenos días Joan, estoy en total acuerdo con esta parábola de Jesucristo.
ResponderEliminarUn saludo.