"¿De qué le sirve a una persona ganar el mundo entero si pierde la alegría de vivir? Perder la alegría de vivir significa que la persona mantiene un fondo de tristeza, que ni el éxito, ni las riquezas, ni las diversiones de este mundo pueden eliminar. Tener la alegría de vivir significa vivir lo inesperado."
(José Luis Vazquez Borau)
Ahora me pregunto: En estas Navidades, ¿hemos tenido auténtica alegría de vivir? Quizá nos queda ese fondo de tristeza...Es que no hemos sabido vivir lo inesperado. Y lo inesperado es Dios que se nos presenta en la persona del otro, Dios que nace en nosotros cuando menos lo esperamos...
Amb diuen a les reunions de Cárites, que Déu s´ens manifesta amb els que pateixen, i nosaltres som les seves ferramentes posan un granet de sorra perque tot funcioni millor.
ResponderEliminarPero jo també crec que Déu s´ens manifesta amb la bellesa de la natura, amb el sonriure d´una criatura i amb moltes altres coses que amb pasan desapercebudes.
Una abraçada desde Valencia, Montserrat