Jesús salió de la sinagoga y entró en casa de Simón. La suegra de Simón estaba enferma, con mucha fiebre, y rogaron a Jesús que la sanase. Jesús se inclinó sobre ella y reprendió a la fiebre, y la fiebre la dejó. Al momento, ella se levantó y se puso a atenderlos. Al ponerse el sol, todos los que tenían enfermos de diferentes enfermedades los llevaron a Jesús; él puso las manos sobre cada uno de ellos y los sanó. De muchos enfermos salieron también demonios que gritaban: – ¡Tú eres el Hijo de Dios! Pero Jesús reprendía a los demonios y no los dejaba hablar, porque sabían que él era el Mesías. Al amanecer, Jesús salió de la ciudad y se dirigió a un lugar apartado. Pero la gente le buscó hasta encontrarle. Querían retenerlo para que no se marchase, pero Jesús les dijo: – También tengo que anunciar las buenas noticias del reino de Dios a los otros pueblos, porque para esto he sido enviado. Así iba Jesús anunciando el mensaje en las sinagogas de Judea. Jesús cura hoy a la suegra de Pedro y sanaba a todos los que le acercaron en aquel pueblo para que los curara. No le dejaban marchar. Jesús les responde que el ha de anunciar a los otros pueblos el Reino de Dios. Son las lecciones del evangelio de hoy: - Que hemos de curar, de liberar del mal a los otros. - Que este mandato de anunciar la Palabra y eliminar el mal debemos ejercerlo, no solamente en nuestro entorno, que nos es agradable y familiar, sino a todo el mundo. Los misioneros tienen claro este mandato. Pero hoy día, todos hemos de ser misioneros en nuestra sociedad. Una sociedad cada día más laica y descristianizada. Quedarnos en nuestra pequeña comunidad; disfrutar de un entorno que piensa como nosotros y nos arropa, puede ser una tentación. Jesús mandó varias veces a sus discípulos a predicar a todo el mundo. |
miércoles, 6 de septiembre de 2023
ANUNCIARLO EN TODO EL MUNDO
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Gracias padre
ResponderEliminarEs verdad debemos ser misioneros en nuestro entorno. AMÉN 🙏🙏🙏
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