lunes, 8 de marzo de 2010

HACE CUATRO AÑOS...


Hoy hace cuatro años que nos dejaba el Hno. Adriano. Os dejo un escrito suyo que fechó el 8 de Marzo de 1988.
"Permite, Señor, que te llene de preguntas.
Sé que no vas a contestármelas. Sé que no tengo derecho a exigirte una respuesta. Sé que no la merezco.
Pero quiero llenarte de preguntas. Las de siempre. Las que me torturan.
¿Por qué Señor, parece prevalecer el mal sobre el bien?
¿Por qué somos tan injustos los hombres, incluso los que ostentan el sagrado título de Juez?
¿Por qué hay tantos pobres y tan pobres? Aunque Tú dijiste que los pobres los tendríamos siempre entre nosotros, ¿por qué tanta pobreza?
¿Por qué tanta miseria moral, tanta ignorancia, tanto desinterés de unos por los otros?
¿Por qué, Señor, sobre los pobres caen todos los males?
¿Por qué los hombres han de ir a la cárcel?¿Por qué?
Sigo preguntando, Señor. Ya te sabes las preguntas de memoria. No importa, pregunto.
¿Por qué tanta indiferencia ante la invalidez de los niños pobres?
¿Por qué tanto abandono de los ancianos pobres?
¿Por qué nuestra juventud no encuentra ideales en que sonreír?
¿Por qué tantos jóvenes se lanzan a la droga como solución de su vida?
¿Por qué toleras que unos pocos traficantes destrocen a tantos miles de inocentes e indefensos?
¿Por qué es tan difícil, Señor, recuperar a un delincuente o a un drogadicto?
¿Qué hacer con ellos?¿Qué ofrecerles que les dé ilusión por la vida?
¿Por qué tantas mujeres explotadas en la prostitución?¿Por qué tanto sadismo de los hombres, que luego las hunden en el desprecio?
¿Por qué, Señor, es tan difícil amar como Tú amaste?
¿Por qué las pequeñas guerras de cada día entre vecinos?
¿Por qué tanto egoísmo y tanta ostentación y tanto despilfarro?
¿Por qué tanta mentira en los que mandan y en los que obedecen?
¿Por qué no es posible repartir la riqueza de manera que todos tengan lo suficiente y un poco más?
¿Por qué...?
Señor, podría llenarte de preguntas y preguntas. Me torturan, Señor. Me tienen acongojado. Muchas noches destrozan mi alma.
Pero no me contestes, Señor.
Abriré nuevamente tu Evangelio y leeré tus palabras. Es suficiente.
Y un día, Señor, (¿pronto?) me lo aclararás todo cuando me recibas en tu morada."

4 comentarios:

  1. Preguntas que son oraciones, oraciones que son preguntas, algunas veces casi pidiendo explicaciones...., pero disfrutando también de esos momentos de felicidad, aunque sean escasos

    Hay que leerlas despacio, muy despacio, casi masticándolas y al final solo te puedes quedar, como él mismo dice, con SUS palabras

    Seguro que con esas aclaraciones que pedía y ya tendrá, va a seguir ayudando y nunca va a dejar de la mano a tod@s l@s olvidad@s que quiso tanto y por quienes tanto luchó, ni a quienes compartísteis su vida con él

    Gracias por habérmele dado a conocer, me están ayudando mucho sus preguntas, sus quejas, sus oraciones,su vida....

    Un abrazo muy fuerte, un poco más especial en este día

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  2. ¡Cuántas almas se pueden atraer con el buen ejemplo!. San Juan Bosco

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  3. Últimamente voy con mil cosas por hacer y mil cosas en la cabeza. Aunque no te comente siempre, que sepas que te leo y que tus escritos, como los textos qeu vas poniendo, me ayudan mucho a reflexionar, a observar.. a detener un momento el tiempo...

    Un Abrazo Joan

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  4. Me gusta que pida No Le conteste
    esas preguntas que no sabremos jamás.
    Me gusta su aceptación del dia de su IDa que es cuando sabrá las respuestas.
    Besucos

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