Paseaban por el parque. El joven seguidor se mostraba preocupado, porque no sabía que regalar a su mejor amigo en el día de su cumpleaños. El Anacoreta, sonriendo, le dijo:
- Lo importante no es el regalo en sí, sino que tú mismo te entregues con el regalo. Hay regalos engañosos. Los hacemos para que nos hagan otro a su vez o para que nos admiren, incluso buscando sobre todo el agradecimiento. Habrás oído contar la historia de aquel niño que regaló una caja vacía a su padre. Era una caja llena de besos. En cierta manera, él iba incluido en el regalo.
Se detuvo un momento para contemplar una flor del parque. Continuó diciendo:
- Mira esta flor. Dios no sólo nos la ofrece, Él se entrega con ella. Si supiéramos ver en todas las cosas a Dios que se nos da...
Sonrió ampliamente y concluyó:
- No importa tanto lo que regales, como que tú te entregues con él...
No se que decir, sólo gracias,No importa tanto lo que regales, como que tú te entregues con él...
ResponderEliminarBuena lección ha dado hoy el anacoreta: me complacen mucho estas palabras escritas.Un abraçada
ResponderEliminarA cada obsequi que fem hi posem un bocinet de nosaltres mateixos, perquè pensem en qui el rebrà.
ResponderEliminar"Salla indivisa manent", llegim aquests dies a l'estendard dels dos preciosos misteris de l'Associació: L'oració a l'Hort de les Oliveres i Vetlleu i Pregueu. Són els primers de la processó del Sant Enterrament, i suposo que ja els hauràs vist alguna vegada...
Que et sigui grata l'estada a Cambrils, i bona Pasqua. Una abraçada.
ES UNA FORMA DE DECIR:"AQUÍ ESTOY,ME IMPORTAS,TE QUIERO". Claro que no es necesario ,pero sí un detalle ,siempre y cuando se haga sin obligación.
ResponderEliminarCreo que sabemos a quien nos entregamos ,cuando decimos "te quiero ".
Besucos
Gó