lunes, 27 de junio de 2011

EL ANACORETA Y LA PEREZA MENTAL


Aquel joven le dijo que al siguiente curso ya no se matricularía en la Facultad de Teología.
- Estos estudios me llenan de dudas. Prefiero la seguridad que me da el Catecismo. Con ello ya tengo suficiente para mi Fe
El Anacoreta lo miró con cierta tristeza y le dijo:
- Hijo mío. A eso se le llama pereza mental...Y si lo que dice el catecismo no lo haces tuyo, no lo reflexionas, no lo interiorizas, no te vale de nada. La Fe no nos dispensa del esfuerzo de la búsqueda, porque la Fe es dinámica y crece y se transforma a medida que lo hacemos nosotros.
Buscó un libro en la biblioteca y leyó en voz alta:
- "Es necesario evitar todo tipo de pereza espiritual. Se dice que el católico no estudia, no busca, no sufre, no experimenta el sublime tormento de la duda, de las tentativas, del movimiento espiritual continuo. ¿No es más grande Ulises, esforzándose ' a divenir del mondo esperto edelli vizi humani e del valore '(llegar a ser experto del mundo, de los vicos humanos y del valor)(Dante, Inf. 26), que la tranquila Penélope?"
Dejó el libro y concluyó:
- ¿Sabes de quién es este texto? De Pablo VI (Insegnamenti, IV (1966) 925.) Hijo mío la auténtica Fe nos exige dudar, buscar, cuestionarnos. Estudia, pero no para "saber" cosas. Hazlo para fundamentar tu conocimiento. Esto fundamentará también tu Fe...

2 comentarios:

  1. Hola Joan Josep:

    Como siempre me haces pensar.
    Quizá a veces me hago demnasiado cómoda y pienso que si me dejo ir en manos de Dios, aunque hay que luchar, pero pocas preguntas me hago ya.
    Una abraçada germá, Montserrat

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  2. la Fe no se intelectualiza... Solo se siente en el fondo del Alma!
    Un Abrazo Joan.

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