"Hay una sola cosa importante sobre todas: el retorno al Padre.
Para que podamos salir limpiamente de en medio de todo lo transitorio e inconcluso: volver a lo Inmenso, a lo Primordial, a la Fuente, al Desconocido, a Aquel que ama y sabe, al Silencioso, al Misericordioso, al Sagrado, a Aquel que lo es todo. Buscar algo, preocupararse de algo que no sea esto, es sólo locura y enfermedad, pues ése es el entero significado y el núcleo de toda existencia, y en eso toman su justa significación todos los asuntos de la vida, todas las necesidades del mundo y de los hombres: todos apuntan a ese único gran regreso a la Fuente.
Todas las metas que no sean definitivas, todos los términos de la línea que podemos ver y planear como términos, son sencillamente absurdos, porque ni siquiera empiezan. El regreso es el fin más allá de todos los fines, y el comienzo de todos los comienzos.
El regreso al Padre no es retroceder en el tiempo, enrollar el rollo de la historia, ni volver del revés nada. Es ir adelante, ir más allá, pues volver sobre los propios pasos sería una vanidad encima de la vanidad, una repetición del mismo absurdo al revés.
Nuestro destino es ir más allá de todo, dejarlo todo, apremiar adelante, hacia el Fin, y hallar en el Fin nuestro Comienzo, el Comienzo siempre nuevo que no tiene fin.
Obedecerle por el camino, para alcanzar a Aquel en quien he comenzado, y que es la clave y el fin, porque es el Comienzo."
(Thomas Merton)
siempre he sido de la creencia que todo final es indicio de un principio.... ya ves y soy gotas simplemente , pero al final vengo a dicer lo mismo que este, para mí, gran autor, que es conocido por mi, desde que tu editas algún que otro escrito suyo.... vamnos... que no debo estar tan p´llá no joan=????
ResponderEliminarun abrazo
Hola Joan Josep:
ResponderEliminarPienso que como una mariposa que sale de la crisálida, nuestra alma se va hacia el Padre.
Gracias por compartir estas lecturas, que tanto nos enseñan.
Una abraçada, Montserrat
EL caso es que me gusta lo que piensa Merton,pero,hay algo en este bendito mundo que no acabo de conciliar y es la enfermedad,el dolor,por muy humano y divino que sea.Entiendo que son "cosas"de mi inmadurez?,mas....me flagela el dolor ajeno y el propio.
ResponderEliminarBesucos,hermano
Gó
Es la meta y el final del camino
ResponderEliminarEl camino puede ser largo y tortuoso, pero al final siempre estará el Padre esperándonos, por muchas veces que hayamos tropezado y equivocado la dirección, ese final siempre será la esperanza que nos ayuda a seguir adelante
Un abrazo y feliz día
Ah, vaig ser admiradora de Thomas Merton, i lectora ("Ningú no és una illa", si no vaig errada) Quina mort la seva, tan estranya.
ResponderEliminarDoncs sí, tornar nets i innocents al Pare, sigui quina sigui la seva essència, perquè ningú el pot interpretar. Fóra absurd que algú s'atribuís ser portaveu d'allò que ens és desconegut. Cal observar la vida a la Terra i obrar en conseqüència. Tota altra elucubració procedeix del nostre cervell que, aquest sí, pot optar per ser net i lluminós.
Olga