"Yo soy el pan vivo que ha bajado del cielo; el que coma de este pan vivirá para siempre. El pan que yo daré es mi propio cuerpo. Lo daré por la vida del mundo.
Los judíos se pusieron a discutir unos con otros:
– ¿Cómo puede este darnos a comer su propio cuerpo?
Jesús les dijo:
– Os aseguro que si no coméis el cuerpo del Hijo del hombre y no bebéis su sangre, no tendréis vida. El que come mi cuerpo y bebe mi sangre tiene vida eterna; y yo le resucitaré el día último. Porque mi cuerpo es verdadera comida, y mi sangre verdadera bebida. El que come mi cuerpo y bebe mi sangre vive unido a mí, y yo vivo unido a él. El Padre, que me ha enviado, tiene vida, y yo vivo por él. De la misma manera, el que me coma vivirá por mí. Hablo del pan que ha bajado del cielo. Este pan no es como el maná que comieron vuestros antepasados, que murieron a pesar de haberlo comido. El que coma de este pan, vivirá para siempre."
|
Estos domingos seguimos el evangelio de Juan que nos habla del Pan de Vida. Los judíos no entendieron a Jesús. Interpretado al pie de la letra, su discurso es incomprensible.
Jesús, con la imagen de su cuerpo y de su sangre, nos quiere dar a entender, que debemos empaparnos de su sustancia. Seguirle, es hacer vida su Palabra.
Los hombres ansiamos vivir. Buscamos vivir en todo lo que hacemos. Tras esas ansias suele encontrarse el vacío. Hacemos mil y una cosa que no nos llenan.
Jesús nos dice qué es lo que debemos hacer para tener la Vida, para vivir para siempre: hacernos Uno con Él. seguir su camino. Hacer Vida su Palabra. Eso es lo que significa comer su cuerpo y beber su sangre. Transformarnos en alguien que vive para los demás. Que se entrega gota a gota por los otros.
Dice el evangelio, que a partir de ese día, muchos lo abandonaron. Por desgracia, muchos siguen abandonándolo. Preferimos vivir para nosotros.
Bon diumenge Joan Josep: El meu pare va escriurer en el día de la meva Comunió "I en aquest Pa i Vi de l´Eucaristía, que jo assaboria ten plena d´Amor aquest bell matí, la seva dolcesa sigui l´arquimesa que guardi mon cor tot temps a venir.
ResponderEliminar