"...y les dio autoridad para expulsar a los demonios y para curar toda clase de dolencias y enfermedades".
Jesús llama a los apóstoles, les da el poder de expulsar demonios y de curar toda clase de enfermedades y los envía.
Jesús nos llama a cada uno de nosotros como hizo con sus discípulos, porque ser cristiano es ser su discípulo, su seguidor. Religiosos y sacerdotes nos hemos considerado los llamados, pero Dios nos llama a todos. Y todos tenemos el poder de luchar contra el mal y de curar las enfermedades. Todo cristiano ha de ser medicina para los demás como lo fue Jesús. Debemos sembrar paz, consuelo, alegría a nuestro alrededor. Jesús nos llama por nuestro nombre y nos envía a repartir amor por la tierra. Todos somos llamados y enviados a sanar.
Hola Joan Josep.
ResponderEliminarDe vegades s´l alivian una mica els mals, simplement sapiguen escoltar i conçolar oi?
Una abraçada, Montserrat