Pedro Guerra no parece muy convencido...Pero otros sí lo estamos. Etty Hillesum, una judía holandesa de 27 años, encontró a Dios antes de morir en Auschwitz. Su diario es estremecedor. Allí encontraréis esta oración:
" A veces es difícil aceptar y comprender, oh Dios, lo que seres creados a tu imagen se hacen unos a otros en estos días de locura. Pero, Dios, yo no me encierro en mi habitación. Procuro mirar la situación directamente, a los ojos, aun en el caso de los peores crímenes, y descubrir así al insignificante ser humano, despojado de todo, en medio de unas monstruosas ruinas causadas por la acción incoherente del hombre. No me acomodo tranquilamente en mi habitación llena de flores, alabándote con las palabras de tus poetas y pensadores. Eso sería demasiado fácil; y, en cualquier caso, no soy tan espiritual como mis amigos generosamente piensan. Todos los seres humanos tienen su intransferible realidad. Lo sé, pero yo no soy una fantasiosa visionaria, oh Dios, ni tampoco una colegiala de alma hermosa. Pretendo confrontarme con tu mundo, Dios, no escaparme de la realidad en busca de bellos sueños, aunque creo que al lado de la más horrible realidad los bellos sueños existen, y continúo, mi alabanza a tu creación, a pesar de todo."
El mal no lo entenderemos nunca; pero a su lado...está el Bien.
Un buenos dias de sábado ¡¡¡
ResponderEliminarLas palabras de Etty, de esta joven mujer que se enfrenta a lo inevitable, hablan , mejor que nadie , de mis dudas.
Joan , creo comprender al hombre desnudo y portando solamente la incoherencia de sus acciones. Y creo entender que , ante el miedo a lo desconocido, se agarre a una idea que le aporte confianza ciega en lo que ha de encontrar, después.
Dejo a tu libre albedrío la publicación de éste comen .
Un beso.... o dos.
Totalmente de acuerdo con tu última frase Joan, llevo un par de días con esto en la cabeza y cada vez lo tengo más claro: mal hay mucho, demasiado y terrible pero el mundo sería un horror si el bien no existiera y no dejo de preguntarme ¿por qué lo único que se lleva los grandes titulares es el mal? ¿por qué nosotr@s mism@s es lo que destacamos, llevándonos las manos a la cabeza? ¿no podríamos empezar a cambiar también eso?
ResponderEliminarImpresionante el testimonio de esa mujer, escrito en esas circunstancias.... ¡qué fácil lo tenemos algun@s, qué poco lo apreciamos y qué poco testimonio damos de ello!
Gracias por verlo así
Un abrazo y feliz sábado
Se me olvidó decirte que no conocía esta canción de Pedro Guerra y que me ha gustado mucho la canción y el video, gracias
ResponderEliminarGloria. Hay que leer todo el diario. La Fe de Etty es un proceso apasionante, no solamente un agarradero ante lo inevitable. El diario a secas lo puedes leer en el libro: "Una vida conmocionada: diario 1941 - 1943, Ed. Anthropos, Barcelona 2007.
ResponderEliminarTambién lo encontraras comentado paso a paso por el jesuita belga Paul Lebau en el libro: "Etty Hillesum - Un itinerario espiritual. Amsterdam 1941 . Autschwitz 1943" Ed. Sal Terrae, Santander, 2000.
No conocia está canción de Pedro Guerra. Gracias Joan.
ResponderEliminarQuizás cuando tomemos conciencia nuestro lado más alejado de Dios, cuando caigmos en la cuenta del mal que a veces habita en nuestra mente, podremos comprender al que infringe causa dolor y llegar a la cuenta de que esta persona es otra "victima" de su propio sufrimiento alejado de Dios. No se si me he explicado bien, Joan.
Un Abrazo grande grande.
Hari
Para los corazones grandes no hay yugos capaces de oprimirlos entre los muros de la locura humana.
ResponderEliminarEn definitiva, solo la fe y la esperanza nos salvan de revelarnos contra la humanidad que el propio Dios quiere recuperar para Sí.
Un abrazo
Pablo
Joan,es milagroso saber en dónde encuentra el "otro" la conversión.He copiado la url que has dejado abajo y me interesaré por ese diario.
ResponderEliminarDesde su "pasión",debe ser un acto generoso por parte de ella.Mas que generoso,de fé plena¡¡
Besucos
Gó