Ayer recibí un correo de alguien que se confesaba perplejo ante la vida. Afirmaba que había perdido todos los referentes. El resultado era una sensación de vacío insoportable, debido a la falta de sentido para su vida.
Lo confiesen o no, hay muchas personas que se encuentran inmersas en ese desencanto. Lo que los sociólogos denominan postmodernidad.
El descrédito de las religiones mayoritarias. El descubrimiento de que , al contrario de lo que predicaba la modernidad, la ciencia no tiene respuesta a todo y no puede eliminar de este mundo todos los males y todo el sufrimiento. El ver, que cualquier fenómeno de la naturaleza es mucho más fuerte que toda nuestra cultura. Darse cuenta que el dinero, los recursos no pueden comprar el amor, la belleza, la felicidad...Todo esto, este ocaso de los dioses...lleva a la humanidad por derroteros peligrosos: el fundamentalismo y el nihilismo.
Cuando todo tiembla bajo nuestros pies, buscamos febrilmente algo en lo que agarrarnos. El fundamentalista se agarra en lo que se está derrumbando. La crisis de la religión no significa su anulación. se trata de una purificación que intenta eliminar todo la suciedad que se ha acumulado con los siglos. El fundamentalista, en vez de agarrarse en lo esencial, hace fundamento de su espiritualidad la porquería que se desprende...Hace bandera de las estructuras, de los ritos...de lo que es caduco y olvida lo verdadero.
El nihilista se agarra al vacío. Lo relativiza todo, ya que nada tiene sentido. Convierte la vida en un mero ejercicio intelectual. Es decir, se vuelve cínico e intelectualista. O simplemente se transforma en un nihilista práctico que, ya que no encuentra sentido a la vida, busca sacar de ella el máximo placer, el mayor partido, aunque sea a costa de los otros.
No hay recetas; pero sí hay un camino. Algo así como una vía de dos carriles de la que corremos el peligro de tomar sólo uno. Y nuestro tren necesita los dos, que además corren paralelos, para circular correctamente:
- Cimentarnos en nosotros. Como Yo, no como Ego. Es decir descubrirnos como persona, crecer.
- Cimentarnos en Dios. Como soy cristiano concretaré en el Dios que nos muestra Jesús en el Evangelio. Pero como soy consciente de que no todos los que me leen son cristianos, diré fundamentarse en lo Inefable, en lo que no tiene fundamento porque está fuera de nosotros, en eso que nos une al Universo y al Todo. En lo que algunos llamamos Dios.
Los dos raíles juntos. Si ese Dios nos hace olvidar del Hombre, nos destruye como persona...es un simple ídolo, una imaginación.
Si pretendemos hacer crecer solamente al Hombre, tarde o temprano esta soledad acabará con nosotros arrojándonos al vacío del sin sentido.
Muy bueno, me ha gustado.
ResponderEliminarEse vacío del que hablas lo conozco y me atrevería a decir que lo conocemos muchos más, pero algunos hacen como los nihilistas prácticos y pienso que ello provoca más angustias en quienes pasan por su camino.
Sigo tu blog y espero animarte a que sigas escribiendo para deleitarnos.
Un saludo
Hay gente que se suicida habiendo triunfado aparentemente en todo,eso viene a demostrar la falacia del materialismo...muy certero tu diagnóstico
ResponderEliminarUn saludo
¡MARAN ATHA!
ResponderEliminar¡VEN,SEÑOR JESÚS!
Como siempre muéstranos tu Santo Espíritu,para que encontremos el equilibrio en nuestras vidas,y enciende en nosotros el fuego de tu amor.
Bendiciones...
Sinceramente me extraña que esta entrada no tenga muchos más comentarios, por lo menos hasta ahora.
ResponderEliminarSolamente una apreciación muy personal. Somos muy humanos, para lo bueno y para lo malo, y muchas veces tenemos que aferrarnos a algo que nos haga sentir que esta vida tiene un significado; el problema está en saber a qué y nos estamos aferrando y por qué.
Como bien dices, cuando Dios no es más que una idea, nos sirve de poco, y si prescindimos de Él sentimos ese vacío que intentamos rellenar con 'cosas' o incluso con una falsa moralidad.
Un abrazo.
Pablo.
Este es el gran reto de la sociedad: esperemos que lo pase con aprovechamiento. Un saludo y gracias por las entradas
ResponderEliminarJoan,es el existencialismo en carne viva?
ResponderEliminarNO sé cuántos lo dirán,pero..quién no siente ese vacío en la mirada hacia el horizonte que nos limita¡¡
Sé qué significan tus palabras,pues el Dios sin el Hombre carece de esencia y el Hombre si n Él...(sea quien sea Él)se siente sólo.
Besucos
Gó.Agua