Algunos estaban hablando del templo, de la belleza de sus piedras y de las ofrendas que lo adornaban. Jesús dijo:
–Vienen días en que de todo esto que estáis viendo no quedará piedra sobre piedra. ¡Todo será destruido!
Preguntaron a Jesús:
–Maestro, ¿cuándo ocurrirán esas cosas? ¿Cuál será la señal de que ya están a punto de suceder?
Jesús contestó:
- Tened cuidado y no os dejéis engañar. Porque vendrán muchos haciéndose pasar por mí y diciendo: ‘Yo soy’ y ‘Ahora es el momento’, pero no los sigáis. Y cuando oigáis alarmas de guerras y revoluciones no os asustéis, pues aunque todo eso tiene que ocurrir primero, aún no habrá llegado el fin.
Siguió diciéndoles:
- Una nación peleará contra otra y un país hará guerra contra otro; en diferentes lugares habrá grandes terremotos, hambres y enfermedades, y en el cielo se verán cosas espantosas y grandes señales. Pero antes de eso os echarán mano y os perseguirán: os llevarán a juicio en las sinagogas, os meterán en la cárcel y os conducirán ante reyes y gobernadores por causa mía. Así tendréis oportunidad de dar testimonio de mí. Haceos el propósito de no preparar de antemano vuestra defensa, porque yo os daré palabras tan llenas de sabiduría que ninguno de vuestros enemigos podrá resistiros ni contradeciros en nada. Pero seréis traicionados incluso por vuestros padres, hermanos, parientes y amigos. Matarán a algunos de vosotros y todo el mundo os odiará por causa mía, pero no se perderá ni un solo cabello de vuestra cabeza. ¡Permaneced firmes y salvaréis vuestra vida!
Jesús, o posiblemente el evangelista, emplea hoy para hablarnos un estilo apocalítico. Con esas imágenes y metáforas, su intención no es producir miedo, sino todo lo contrario, decirnos que al final el bien triunfará.
El centro de la religión judía era el templo. Era la presencia de Dios en medio del pueblo. Jesús, al decirles que no quedará piedra sobre piedra de él, les está señalando un cambio total. A Dios no hay que buscarlo en una obra humana, sino en el Hombre. Y esta fue una de las acusaciones que lanzaron ante Caifás para condenar a Jesús: "Dice que destruirá el templo"
Venimos de consagrar el templo de la Sagrada Familia. Esta, al igual que todas las iglesias, sólo tiene sentido si es una mediación que nos acerque a Dios. No es un fin en sí misma. Jesús nos lo dice muy claramente: "No os dejéis engañar". Dios no es posesión exclusiva de un templo, de un lugar, ni siquiera de unas personas. Es un Dios de todos. La seguridad de que Él está con nosotros no nos la da un templo, ni siquiera unas personas. Nos la da la incomprensión y la persecución. Porque el cristianismo es todo lo contrario de lo que señala el mundo. Ante la búsqueda de poder, de dominio, de gloria, Jesús nos predicó el Amor al débil, la lucha contra la injustícia, el elogio de la sencillez...Cuando la Iglesia se abraza con el poderoso, cuando busca alianzas en su propio provecho, cuando olvida al pobre...es cuando más lejos está de Dios.
Ser fiel al Evangelio no es fácil. Pero Jesús nos promete que Él permanecerá siempre junto a nosotros. Sólo nos pide perseverancia, fidelidad, firmeza...
Somos débiles y la tentación de la comodidad, del triunfo fácil, del compromiso con el poder la tenemos a la vuelta de la esquina...Se trata de elegir lo que nos compromete antes que lo cómodo. La oración auténtica nos dará fuerzas y luz para encontrar el camino en cada momento...
Jesús, o posiblemente el evangelista, emplea hoy para hablarnos un estilo apocalítico. Con esas imágenes y metáforas, su intención no es producir miedo, sino todo lo contrario, decirnos que al final el bien triunfará.
El centro de la religión judía era el templo. Era la presencia de Dios en medio del pueblo. Jesús, al decirles que no quedará piedra sobre piedra de él, les está señalando un cambio total. A Dios no hay que buscarlo en una obra humana, sino en el Hombre. Y esta fue una de las acusaciones que lanzaron ante Caifás para condenar a Jesús: "Dice que destruirá el templo"
Venimos de consagrar el templo de la Sagrada Familia. Esta, al igual que todas las iglesias, sólo tiene sentido si es una mediación que nos acerque a Dios. No es un fin en sí misma. Jesús nos lo dice muy claramente: "No os dejéis engañar". Dios no es posesión exclusiva de un templo, de un lugar, ni siquiera de unas personas. Es un Dios de todos. La seguridad de que Él está con nosotros no nos la da un templo, ni siquiera unas personas. Nos la da la incomprensión y la persecución. Porque el cristianismo es todo lo contrario de lo que señala el mundo. Ante la búsqueda de poder, de dominio, de gloria, Jesús nos predicó el Amor al débil, la lucha contra la injustícia, el elogio de la sencillez...Cuando la Iglesia se abraza con el poderoso, cuando busca alianzas en su propio provecho, cuando olvida al pobre...es cuando más lejos está de Dios.
Ser fiel al Evangelio no es fácil. Pero Jesús nos promete que Él permanecerá siempre junto a nosotros. Sólo nos pide perseverancia, fidelidad, firmeza...
Somos débiles y la tentación de la comodidad, del triunfo fácil, del compromiso con el poder la tenemos a la vuelta de la esquina...Se trata de elegir lo que nos compromete antes que lo cómodo. La oración auténtica nos dará fuerzas y luz para encontrar el camino en cada momento...
Mi colega el Padre J.M., que conjuga la humildad con una extraña inteligencia, empezó ayer el sermón de la misa vespertina diciendo: "Del templo de la Sagrada Familia no quedará piedra sobre piedra". Luego lo explicó, pero yo creo que el casipatatús que debió darle a alguna viejecita con aquel inicio no se lo quita nadie.
ResponderEliminarHola Joan Josep, los templos son para el hombre, no para Dios: cada uno ya nacemos con nuestro templo. Pero las religiones tienen que magnificar la grandeza: como los faraones y sus pitamides.
ResponderEliminarEl lugar de culto tendria que ser comun: para otras religiones ya que es el mismo Dios. con diferentes miras una abraçada
"No preparar de antemano nuestra defensa.."es una frase que me impactó siempre y con ella procuro caminar.Me parece muy adecuado que se expliquen los conceptos del lenguaje de la Biblia(N.T.en este caso)porque es así que parece un poco apocalíptico,pero entendemos que está pidiendo lo que en resumen desea para el Hombre.Y los garandes templos,como los "grandes poderes " se esfjumarán ñor sí solos,pues en ellos no se encuentra la Verdad.
ResponderEliminarConfiemos en SU ayuda permanente.
Besucos
Gó