Lo vemos estos días. El hombre se cansa de la opresión, de la injusticia, de la falta de libertad. La paz alcanzada con la represión, la paz del dictador, acaba generando la indignación de la gente. Túnez, Egipto...un barrio de una ciudad europea..., la reacción es siempre la misma. Y tanto los que viven los disturbios en su propia carne, como los que los vemos por la televisión corremos el mismo peligro. El de quedarnos en una indignación ética. Los autores de la revolución, porque si la fundamentan en el odio al opresor, lo único que pueden generar, es lo que popularmente llamamos "dar la vuelta a la tortilla". Se derriba al opresor, pero otros pasan a ser igualmente opresores. El pueblo sigue igualmente oprimido.
Los que lo vemos por los media, también corremos el peligro, y cada día más por el aluvión de imágenes, en esa indignación ética, teñida de moralina, que nos impide ver nuestras propias injusticias.
Tomás de Aquino escribió en la Summa: "lo que hacemos movidos por el amor es lo que hacemos más libremente." Y es lo único que puede realmente cambiar este mundo. El odio sólo engendra odio. La violencia, por muy justificada que la creamos, sólo engendra violencia. Y al final siempre pagan el pato los inocentes.
Tenemos un sabio refrán, no todos los son, que nos dice que "a río revuelto, ganancia de pescadores". Me da un miedo terrible, que en Túnez, Egipto, etc...haya unos señores, llamadlos por ejemplo fundamentalistas, o gran capital, o..., con la caña preparada para que la tortilla gire en su favor...
Hola Joan Josep, no estas solo en este miedo,creo que somos muchos que lo tememos. Si mas no:aprovecharan el rebuelo para instalarse,Una abraçada
ResponderEliminarLa verdad es que así es...cuando el río suena...agua lleva. Y siempre hay sectores que saben aprovechar esa revolución del pueblo oprimido, para conseguir otras cosas...que siguen oprimiendo al pueblo.Vamos, que se cambia de perro, pero con los mismos collares que aprisionan.Ya veremos en qué queda la cosa... Un saludo.
ResponderEliminarMe gusta la frase de Tomás de Aquino, es cierto que el amor es lo que nos da siempre mayor libertad.
ResponderEliminarEs muy preocupante la situación, máxime cuando el presidente no tiene ninguna intención de dimitir, ya veremos a ver en qué termina todo, esperemos que no sea en una guerra civil
Un abrazo