El joven seguidor preguntó al Anacoreta:
- ¿Por qué oponemos siempre ley y amor?
Rió rl anciano y respondió:
- Exacto, ¿por que las oponemos? Porque las entendemos mal; porque las separamos. Consideramos las leyes como una lista de obligaciones y el amor como un sentimiento. Algo sin relación las unas con el otro.
Miró al joven y prosiguió:
- El amor no es un sentimiento, es una forma de vivir. Y las leyes no son listas, son ayudas que nos indican qué hemos de hacer para vivir el amor. Hemos deformados las leyes en listas de prohibiciones. Las hemos transformado en cadenas. Las hemos desvinculado totalmente del amor.
Luego, colocando su mano sobre el hombro del joven, concluyó:
- Ese es el sentido de las Reglas para los monjes. Un camino para vivir el amor a Dios y el amor a sus hermanos. Ese debería ser el sentido del Derecho Canónico, normas para ayudar al cristiano a amar. Pero nunca olvides, que la verdadera Regla es el Evangelio...
Jopela!!Es que la palabra obligación suena muy mal a mis oidos.Me gusta más la responsabilidad,la enseñanza,las opiniones,criterio,coherencia..
ResponderEliminarVisto desde ese punto ,puede ser así,pero....sigo pensando que el AMOR es un sentimiento carente de normas.Solo....AMA amando!
Besucos hermano
Gó
Pues cambia la palabra normas por consejos. Un abrazo: Joan Josep
ResponderEliminarSegun lo que yo sé y lo "experimentado" en la vida, el amor no atiende ni a razones, ni consejos, ni normas, ni leyes , ni ná de ná.
ResponderEliminarLa Ley, las leyes, las entiendo como un conjunto de normas que han tenido, de forma forzosa, que aparecer como medida disuasoria en y para el hombre.
Que ambas cosas pueden convivir, no lo dudo, que sean complementarias... me da que no. Al menos para esta mujer ya metidita en años ... ( jajajaja y en carnes)
Joan , y fijate lo qque hacemos con el amor y la ley .... jajajajaja ¡¡¡ DE LIBRO¡¡¡¡
Besos, sin nombre