viernes, 23 de mayo de 2014

PARÁBOLA (31)


Se me mostró una noche oscura. Al poco se vio una tenue luz en el horizonte, que fue aumentando hasta dar paso al sol, que a medida que se alzaba lo iluminó todo con una claridad cada vez más radiante. Y escuché estas palabras:
- Nunca te desanimes por negras que veas las cosas. Poco a poco la luz se hará en tu vida y desaparecerán las tinieblas. Por eso, cada mañana debes levantarte como si volvieras a nacer. La Luz te espera...

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