Llegó cansado pero lleno de energía. Y cuando estuvo frente al Anacoreta dijo con firmeza:
- Me avergüenza pertenecer a la Iglesia. Una Iglesia aliada con el poder, que busca privilegios. Una Iglesia llena de hipócritas que rezan y van a misa y luego son injustos con los demás, abusan y oprimen a sus empleados. Una Iglesia que mira hacia otro lado cuando ve ahogarse a la los inmigrantes en el mediterráneo. En fin, que prefiero arreglármelas a solas con Dios.
El Anacoreta guardó silencio durante más rato del habitual. Luego, con calma, dijo:
- Sí, es difícil hablar de la Iglesia sin criticarla. Por desgracia no es lo evangélica que debería ser. Pero ¿por qué hablamos de ella como si fuera algo ajeno a nosotros? TODOS formamos la Iglesia; porque no es una estructura, es la comunidad de los que seguimos a Jesús.
Hizo una pausa y prosiguió:
- Si tiene todos esos defectos es porque son nuestros defectos. Empecemos por cambiar nosotros. Esforcémonos en nuestro ambiente por hacer que nuestra comunidad sea más evangélica. No podemos decir que nos basta relacionarnos a solas con Dios. El Evangelio es para vivirlo en comunidad. Y esa comunidad, que es la Iglesia, depende de nosotros. Y no podemos exigir a los demás nada, si antes no nos entregamos nosotros totalmente...
Y aquel hombre regresó a la ciudad con ganas de cambiar su comunidad...
Cal formar part d'una comunitat, en aquest cas de creients, per poder emetre una opinió vàlida que concerneixi als germans. I res no conforta més que pertànyer a una comunitat que ens aculli, sempre que estem disposat a acollir nosaltres també.
ResponderEliminarUna abraçada, Joan Josep, i molta salut.
Cert i no cert, una comunitat no té una estructura piramidal rígida, i si els de dalt no representen el sentir majoritari de la comunitat es canvien. L'església institució no ha corregit els defectes organitzatius adquirits en la seua etapa de poder territorial, i dona massa exemples de dirigents fora de lloc i de l'evangeli. És hora de rectificar i reconduir aquests defectes entre tots, perquè som església.
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