lunes, 25 de julio de 2011

EL HORROR DE LA INTOLERANCIA


Hechos como los ocurridos en Noruega ponen de manifiesto hasta qué extremos puede llegar la intolerancia. "Lo que he hecho es horroroso, pero era necesario" es el paradigma de que el fin justifica los medios. Es la afirmación de que quien no piensa como yo, no merece vivir.
Ayer, visitando el blog de Cortés, un individuo que no merece ni ser nombrado, se despachaba, entre otras, con la siguiente lindeza:
"En una Iglesia podrida cuyos mayores enemigos son los gusanos, se impone la utilización del vermicida y después, a fumigar. Si aplastar cucarachas es facilísimo.

Sin una lágrima."
Y que cada palo aguante su vela.
Si reemplazáis la palabra Iglesia por Europa, Breivik la firmaría sin problemas. Es lo que él hizo y lo justifica como necesario. A eso conduce la intolerancia. No importa del signo que sea, religiosa, racial, política, de derechas o de izquierdas. Siempre hay un denominador común: yo tengo la verdad y el que no piense como yo no merece ni siquiera vivir. Hay que aplastarlo.
El problema es tan grave, como que sigue habiendo servios que creen que las matanzas en Bosnia eran necesarias, personas que creen que el Holocausto es una exageración o incluso una invención, españoles que creen que curas, frailes y monjas debían morir y otros que siguen sin aceptar que hubo represión franquista.
Y es que la tolerancia, la verdadera, no la del todo vale, sino la del respeto a la diferencia, es mucho más difícil de aplicar de lo que parece. Respetar al otro comporta que yo me he de bajar de mi pedestal, y eso no nos gusta. Respetar al otro implica que he de intentar colocarme en su lugar, y no nos gustan los esfuerzos. Respetar al otro nos obliga a escuchar, dialogar, cuestionar mis ideas...Y eso no nos gusta.
No sé si Breivik actuó solo. Posiblemente. Pero por desgracia, por este mundo, sueltos o en grupo, corren muchos Breivik, demasiados. Morenos o rubios. Religiosos o ateos. De derechas o de izquierdas. No importa...son demasiados. Uno solo, ya es demasiado... 



6 comentarios:

  1. Hola Joan josep:
    Mientras te estoy kleyendo, me está ayudando a l8impiar la casa una chica de religión musulmana.
    nos llevamos de maravilla.
    Pues bien hace un rato nuestro cinversación ,era que Dios, no quiere guerras.
    Y en Cáritas y en mi Parróquia atendemos a los necesitados de nuestro Barrio y demarcación, sean sus ideas distintas o la religión que sea ¡faltaría más!.
    El hecho que hoy mencionas ha sido horrible.
    Una abraçada germá, Montserrat

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  2. Para que no haya error, puntualizo que el indivíduo que no merece ser nombrado, no es el Hermano Cortés, sino el que escribía el comentario que he copiado. Un abrazo: Joan Josep

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  3. És una tragèdia tan terrible que costa assimilar-la. No crec que algú pugui actuar d'aquesta manera, per intolerant que sigui; per força ha de tenir una malaltia psíquica extremadament greu; em sap greu, però és l'única explicació que el meu cap pot assimilar...
    Gràcies per la sensibilitat que has demostrat escollint aquesta música per tractar aquest tema; és un homenatge preciós.
    Una abraçada.

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  4. Gracias por la reflexión!!
    Esto debe acabar!!!

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  5. Joan:Uno solo ya es demasiado para "matar"al HOMBRE.
    Tolerancia,respeto,honradez,honestidad,
    contra intolerancia,soberbia,locura?orgullo,muerte,abolición..
    Hay palabras que encierren hechos más cruentos?
    Bendito el que mira al otro como si de la única flor del universo se tratase.
    Besucos,hermano

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  6. Hola JOan Josep bon dia i ben trovat.

    Estos son los endemoniados, si es que se les puede llamar asi:porque de enfermos,nada de nada; ni del alma, pues tienen el espiritu frio y calculador siendo conscientes de sus actos.

    Forman parte, y verguenza del genero humano: la convivencia, es pulir, lijar asperezas entre las diferentes culturas, religiones , razas,y fanaticos de toda indole: quieren rajar este mastil de humanidad y convivencia. Una abraçada julio

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