El Anacoreta comentó con el joven que le seguía:
- El otro día una amiga me preguntó, si se puede estar lleno de Dios sin saberlo...
El joven, que no sabía qué responder, lo hizo con otra pregunta:
- Eso ¿Los no creyentes o los que siguen otra religión , que también hacen cosas buenas, las hacen movidos por Dios?
Sonrió el anciano como si esperase esa reacción del joven. Se sentó y dijo:
- El otro día recibí un Power Point en el que se decía: "Dios tiene un plan para cada uno de nosotros". Eso me hizo pensar en la Providencia. Esa frase la podemos interpretar literalmente y entonces quedamos reducidos a meras marionetas en las manos de Dios. Todo lo que hacemos está prefijado. Y eso no es cierto.
Volvió a sonreír y prosiguió:
- Otros te dirán que todo depende de nuestro esfuerzo. Que no podemos sentarnos a esperar que Dios actúe. Que lo que nosotros no hagamos, nadie lo hará. Somos nosotros los que tenemos que hacer que las cosas ocurran. Y eso tampoco es totalmente cierto.
Ante un nuevo silencio del Anacoreta, el joven preguntó:
- Entonces, ¿dónde está la providencia?
Miró el anciano al joven y con una gran sonrisa respondió:
- No sé si es exactamente en medio de los dos conceptos, pero por ahí andará. Mira. Dios colabora con todos los que hacen el bien. Con cualquiera que hace el bien. Pablo, en Romanos 8, 28 nos dice que Dios colabora con aquellos que le aman, para su bien. Sí. Ya sé. Me dirás que los ateos no le aman. Seguramente porque no lo conocen. Y casi seguro, porque la imagen que nosotros les transmitimos de Dios no es para ser amada...Sí, me dirás que Pablo dice "a los que Él llama..." ¿Y quién somos nosotros para determinar a quién ha llamado o a quien no?¿Sólo llama a los creyentes?¿Sólo llama a los de mi religión?
Respiró profundamente y prosiguió:
- Dios coopera con nosotros. Eso es la Providencia. ¿Y sabes lo más maravilloso? Dios utiliza incluso nuestros errores y pecados para producir el bien. Por eso todo es un regalo de Dios...
Y levantándose y riendo dijo:
- Y vámonos al comedor de las Calcutas, esa colaboración de Dios con gente que da limosna y con unas monjitas que la reparten, si queremos comer hoy...
Siempre he creído que Dios nos señala el camino, pero también nos da libertad para que
ResponderEliminarobremos en consecuencia, eso es lo maravilloso y a la vez lo preocupante, la responsabilidad es nuestra, no vale echar las culpas al de al lado....
No me quiero repetir pero hago mías tus tres preguntas:
"¿Y quién somos nosotros para.....?
"¿Sólo llama a....?
"¿Sólo llama a....?
Un abrazo Joan, en una mañana igual de soleada que la de ayer, pero un poquitín más clara y brillante...
Le felicito Joan Josep, por esta entrada tan original y pedagógica. Gracias, me ha servido de mucho.Estamos en la misma onda....
ResponderEliminarCon ternura
Sor.Cecilia
Desde cuando hay creientes, desde cuando hay escogidos, quizas desde que el hombre tiene consciencia? que cree en un gran espiritu: y que sabemos nosotros quien elige, y para què; y si cree Ho no cree-todos somos iguales, cada uno con su cruz,siendo ho no siendo consciente de ella.Pero el amor, es el comun denominador, y eso es lo que bale una abraçada
ResponderEliminarEl otro día recibí un Power Point ...
ResponderEliminarSi alguien sabe como comunicar su Palabra, ese es...
Joan ....Gracias¡¡¡
ResponderEliminarDios coopera con nosotros.Eso me basta ¡
Besucos y bendiciones¡¡
Gó
Es un consuelo tus palabras. No sé si fui llamada ( y no escuche o soy sorda), ni si esta enredando en "mis cosas".... pero ... alivia saber que si uno da un puñetazo en la mesa , no está siendo una rebelde. ¿ Coopera? ¿ Tiene una misión para mi y mi vida ?
ResponderEliminar¡¡¡¡ Me va a oir cuando estemos frente a frente ¡¡¡¡
¿ Por qué se le olvidarón las "chuches" para esta niña ?
Quiero chuches ¡¡¡ quiero chuches ¡¡¡
Besitos , sin caramelos.