Hay varias razones por las que he hecho mi entrada a estas horas. La primera, que he estado liado toda la mañana con mi trabajo. La segunda, que he ido a comer con dos buenas amigas blogueras. La tercera, que la película no es para hacer un gran comentario.
La película es correcta, pero no pasa de ahí. Y para sacar alguna lección tendré que hacer grandes esfuerzos.
Evan Treborn es un niño que pasa en su infancia juntos a unos amigos unos terribles traumas. Esto hace que tenga unas lagunas o ausencias de memoria ,que le impiden recordar esos momentos. El psiquiatra le hace escribir un diario. Ya en edad adulta, al releer esos diarios, tiene la posibilidad de volver al pasado. En esos viajes intenta cambiar lo que ocurrió. El resultado es que, cuando regresa a la realidad, todo es diferente, pero a peor. Para ayudar a sus amigos y a su madre, cambiando el presente, vuelve repetidas veces al pasado. Sólo, al menos aparentemente, en el último "viaje" logrará cambiarlo todo, hacer que nada de lo negativo se produzca.
La película es entretenida. Está correctamente dirigida.
La reflexión que he sacado es la de que es inútil volver atrás. Es inútil torturarse con lo que pudimos hacer y no hicimos. Lo positivo es luchar con el presente que nos toca vivir para hacer un futuro mejor. El pasado sirve para sacar lecciones y evitar futuros errores, pero de nada sirve culpabilizarse o preguntarse constantemente qué habría ocurrido si hubiésemos actuado de otra forma. Quizá, como muestra repetidas veces la película, el resultado habría sido peor.
En definitiva. Si queréis hacer un cineforum o pasarla a vuestros alumnos para reflexionar dobre los valores, mejor que busquéis otra película. Si queréis pasar un rato entretenido, lo conseguiréis si os gusta la ficción.
Coincido contigo en que el pasado sólamente nos debe servir como filtro para nuestras actuaciones presentes y futuras. Me viene a la memoria el refrán:
ResponderEliminara lo pasado se le dice adios y a lo que venga, hola.
Un abrazo.
estoy de acuerdo contigo joan...el pasado quedó atrás y el presente es lo único en lo que nos podemos esforzar para que este, que en un futuro será nuestro pasado también, no sea empañado solo de cosas que nos hagan sentir mal, sino también de un cajón lleno de recuerdos que nos hayan hecho crecer como personas.....lamentarse por lo que no fue es un absurdo que sólo se evita en actúar en aquello que realmente queremos que sea sin cometer los mismos errores, aunque sabes que podemos caer 50 veces en la misma piedra, pero al menos intentar que las cosas sean con resultados diferentes en nuestro interior
ResponderEliminarHola Joan Josep:
ResponderEliminarTienes razón lo hecho, hecho está.
A mi a veces me gusta revobinar pero para disfrutar de los bellos recuerdos.
lo que no me gusta, lo barro y ya está.
No he visto la película.
Igual me la alquilo.
Una abraçada, Montserrat
Bueno Juan Josep , los que la podeís ver, me parace fántastico yo no tengo esa oportunidad,pero no puedo comertarle nada al respecto.
ResponderEliminarUn abrazo
sor.Cecilia
Tienes razón Joan, el pasado pasado es, pero lo cierto es que a veces nuestro presente se alimenta de nuestro pasado.
ResponderEliminarQuiero decir que muchas veces actuamos según las enseñanzas de nuestro pasado y somos como somos porque hemos vivido un pasado, bueno o malo pero vivido.
Es un tema largo y complicado.
Un saludo
Joan , pero...de vez en cuando , uno cae en la tentación de reconsiderar sus actuaciones. Tener la mente clara y saber no nada se puede desandar, aleja el sentimiento de culpabilidad . Se hizo, lo que en ese momento se creia justo o necesario. Así lo veo .
ResponderEliminarBesos, muchos