lunes, 13 de enero de 2014

EL ANACORETA Y EL COMPROMISO


El Anacoreta recibió la visita de dos jóvenes. Uno, dudaba en casarse. No veía la posibilidad de comprometerse por toda la vida. Lo mismo le sucedía al otro. No se atrevía a hacerse religioso, porque no se creía capaz de comprometerse para siempre. ¿Y si cambio de parecer? Decían los dos.
El anciano comentó con su joven seguidor la tristeza que le producía la falta de compromiso que mostraban los jóvenes. Las dudas que los ataban a la hora de tomar una decisión.
- Cuánta razón tenía el filosofo Julián Marias cuando escribió: "Siempre he creído que la vida no vale la pena más que cuando se pone a una carta, sin restricciones, sin reservas. Son innumerables las personas, muy especialmente en nuestro tiempo, que no lo hacen por miedo a la vida, que no se atreven a ser felices porque temen lo irrevocable, porque saben que si lo hacen, se exponen a la vez a ser felices".
Miró al joven seguidor y concluyó:
- Por desgracia, nos falta el valor de jugarnos la vida por un ideal, de lanzarnos al vacío...Eso nos condena muchas veces a una vida mediocre y triste. Además, si de verdad somos cristianos, sabemos que no nos lanzamos al vacío, nos lanzamos a los brazos amorosos de Dios.   

No hay comentarios:

Publicar un comentario