jueves, 23 de diciembre de 2021

SE LLAMARÁ JUAN

 


A Isabel se le cumplió el tiempo del parto y dio a luz un hijo. Se enteraron sus vecinos y parientes de que el Señor le había hecho una gran misericordia, y la felicitaban.
A los ocho días fueron a circuncidar al niño, y lo llamaban Zacarías, como a su padre. La madre intervino diciendo: "¡No! Se va a llamar Juan." Le replicaron: "Ninguno de tus parientes se llama así." Entonces preguntaban por señas al padre cómo quería que se llamase. Él pidió una tablilla y escribió: "Juan es su nombre." Todos se quedaron extrañados.
Inmediatamente se le soltó la boca y la lengua, y empezó a hablar bendiciendo a Dios. Los vecinos quedaron sobrecogidos, y corrió la noticia por toda la montaña de Judea. Y todos los que lo oían reflexionaban diciendo: "¿Qué va a ser este niño?" Porque la mano del Señor estaba con él.

"Siempre hemos comentado el «Sí» de María, dentro de la Historia de la Salvación, y la importancia de ese Sí para que la encarnación aconteciera. Pocas veces, más bien casi nunca, se ha dicho palabra alguna sobre el No que pronunció Isabel, tan importante en la Historia Salvífica como el Sí de María. Las maternidades de estas dos mujeres estuvieron marcadas por las palabras que pronunciaron. El SÍ de María, que es expresión de su apertura al don del Espíritu y el NO de Isabel (¡No!, se llamará Juan), que rompió con la tradición del siempre fue así, para ser fiel a la voluntad de Dios. De hecho, Juan significa “el que es fiel”
Dejémonos inspirar por la valentía de estas dos mujeres de fe, María e Isabel. Que ellas acompañen la experiencia de Navidad de este año y que nos transmitan su coraje, para saber decir sí o no, según la inspiración del Espíritu, y ser así capaces de generar vida nueva, hasta llegar a ser cristianos que ardamos en el amor." (Koinonía)

No hay comentarios:

Publicar un comentario