Hoy sábado y en el ambiente de violencia que se vive en el mundo, podemos rezar este poema oración de Thomas Merton.
"Señora, la noche está cayendo y la oscuridad
roba la sangre toda del llagado occidente.
Las estrellas surgen y me hielan el corazón
con gotas de música impalpable, frágil como el hielo
y amarga como la cruz del año nuevo.
¿Dónde una voz en el mundo
te ha suplicado, Señora, por la paz que está
en tus manos?
En un día de sangre y de muchas heridas
veo alzarse gobiernos, tras el horizonte de acero,
empuñar las armas y empezar a matar.
¿Dónde en el mundo una sociedad confió en ti?
Fuera, donde acampan los soldados,
los cañones empiezan a retumbar
y un nuevo invierno desciende
para sellar en hielo nuestros años.
El tren último grita
mientras huye espantado de este valle de estancieros
donde todas las avecillas han muerto.
Blancos están los caminos, mudos los campos,
ya no hay voces en el bosque
y los árboles yerguen patíbulos
contra los astros de ojos afilados.
Oh, ¿dónde irán a matar de nuevo a Cristo
en la tierra de estos hombres muertos?
Señora, la noche nos ha agarrado el corazón
y el mundo entero se derrumba.
Las palabras se me hielan en la seca garganta
mientras oro por un país sin oración,
y camino hacia ti por el agua todo el invierno
en un año que codicia la guerra."
(Thomas Merton, traducción de Luis Alonso Schökel, sj)