Un amigo dijo al Anacoreta:
- Te envidio. Tú has encontrado a Dios. Yo, lo sigo buscando.
El Anciano sonrió pensativamente antes de responder:
- Un viejo abad dijo a sus monjes: "los monjes que viven en el monasterio como si hubieran encontrado a Dios, no son verdaderos monjes." Si en algún momento yo llegara a pensar que estoy más cerca de Dios que alguna otra persona, me estaría engañando.
El amigo replicó:
- Pero tú hace años que lo has dejado todo por Él. Meditas todos los días , vives en su presencia...
El Anacoreta volvió a sonreír antes de responder:
- Hemos de buscar a Dios...,pero a Él nunca lo encontraremos. Sólo podemos ser encontrados por Él. Eso hace, que quienes creemos estar muy cerca de Él, estamos en realidad muy lejos. Y aquellos que creen estar alejados, lo poseen en su corazón. Recuerda el Fariseo y el Publicano.
Y el amigo se quedó pensativo...
Dios es la búsqueda constante y sin embargo, cuando lo Intuimos/sentimos dentro de nosotros y en los demás, se convirte en certeza. Pero al instante siguiente.... me vuelvo alejar.
ResponderEliminarUn Beso Joan.
Hari
Decía el Padre Vivas Perez, un jesuita y un profesor mío de filosofía: "Quien cree que lo ha perdido todo, está en el camino de encontrar lo más importante si está dispuesto a escuchar". Era un hombre tremendamente instruido y estudioso, pero humilde y paciente con nosotros.
ResponderEliminarAgradezco el haber conocido a personas de tanta valía.
Un abrazo.
Pablo.
¿ Y quién puede estar seguro de haber encontrado nada? Ayer hablabas de paraisos interiores... a veces, me siento con si hubiese atrapado una infima parte de ese paraiso... otras... Pero, hoy, he capturado dos trocitos de los mejores.
ResponderEliminarSé que me vas a entender cuando me leas en Om.
Un beso, lleno de una inmensa felicidad que deseo compartir contigo.
La vida és un camí on mai no hi parem de buscar. Els poemes del meu amic Francisco Cejudo al blog Tierras promentidas ho espressen molt bé.
ResponderEliminarEn los momentos más dificiles de mi vida, Dios llega a rescatarme, me abrazo a el, confio en el, me ve sonreir y es cuando me alejo, continuo buscando a Dios le pido que habite en mi y no me permita abandonarle, por que es cuando me pierdo...
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