"Si me conocéis, también conoceréis a mi Padre; y desde ahora ya le conocéis y le estáis viendo.
Felipe le dijo entonces:
– Señor, déjanos ver al Padre y con eso nos basta.
Jesús le contestó:
– Felipe, ¿tanto tiempo hace que estoy con vosotros y todavía no me conoces? El que me ve a mí ve al Padre: ¿por qué me pides que os deje ver al Padre? ¿No crees que yo estoy en el Padre y el Padre en mí? Las cosas que yo os digo no las digo por mi propia cuenta. El Padre, que vive en mí, es el que hace su propia obra. Creedme que yo estoy en el Padre y el Padre en mí; si no, creed al menos por las propias obras. Os aseguro que el que cree en mí hará también las obras que yo hago; y hará otras todavía más grandes, porque yo voy al Padre. Y todo lo que pidáis en mi nombre yo lo haré, para que por el Hijo se manifieste la gloria del Padre. Yo haré cualquier cosa que me pidáis en mi nombre."
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Jesús es la imagen del Padre. Sólo podemos conocerlo a través de Él. Es el Verbo Encarnado. La Palabra de Dios hecha hombre.
"En el llamado “Testamento espiritual” de Jesús para la comunidad, que abarca los capítulos 13-17, se sintetiza el núcleo de la totalidad del evangelio de Juan: Jesús es la manifestación de la revelación del Padre. Y uno de los aspectos más atractivos es la densidad de lo esencial: la relación permanente y profunda unidad de Jesús con el Padre. Ante el deseo de Felipe: “Muéstranos al Padre y nos basta”, Jesús aclara de qué modo Él es el camino que lleva al Padre. Él no es “camino” en cuanto transmite fenómenos mágicos, sino que lo es del modo como lo experimenta la comunidad discipular: con sus palabras y praxis; lo es en cuanto Palabra de Dios humanada, encarnando en su vida, la voluntad de su Padre. La única manera de recorrer este camino es mediante la relación de fe y vida. Jesús está convencido de que no hay relación con Dios, ser hijo, sin la tarea histórica del amor al prójimo, ser hermano, construyendo fraternidad a escala universal. ¿Este es el camino que recorremos con la Iglesia?" (Koinonía)
"...El Padre, que vive en mí, es el que hace su propia obra. Creedme que yo estoy en el Padre y el Padre en mí; si no, creed al menos por las propias obras. Os aseguro que el que cree en mí hará también las obras que yo hago; y hará otras todavía más grandes, porque yo voy al Padre. Y todo lo que pidáis en mi nombre yo lo haré, para que por el Hijo se manifieste la gloria del Padre..."
ResponderEliminarLa única manera de recorrer este camino es mediante la relación de fe y vida. Jesús está convencido de que no hay relación con Dios, ser hijo, sin la tarea histórica del amor al prójimo, ser hermano, construyendo fraternidad a escala universal. (Koinonia) Pare Nostre que esteu en el cel. Santificat sigui el teu nom, Vingui a nosaltres el teu REGNE. Amén.