Aquel hombre era espiritual. Tenía una gran inquietud religiosa. Leía los mejores libros de espiritualidad. Asistía a cursillos y congresos de teología. Analizaba la Palabra de Dios con la ayuda de los mejores exégetas...Sin embargo le dijo al Anacoreta:
- No noto ningún progreso en mi vida. Cada día la siento más vacía. Como más cerca quiero estar de Dios, más lejos me parece estar de Él...
El anciano le puso una mano en el hombro y se lo llevó a un rincón solitario para hablarle. Entonces le dijo:
- Quizá buscas de masiado y lo que hay que hacer, es dejarse encontrar...Los conocimientos no sirven de nada si no nos transforman. Y en el caso de la religión, si no nos llevan al Otro.
Miró sonriendo al hombre y prosiguió:
- De nada nos sirve toda la exégesis crítica, todos los estudios literarios y teológicos, si no cambian nuestro corazón. Leí una vez un ejemplo muy interesante: Un hombre estaba rezando el rosario cuando llamaron a su puerta, enfadado despidió con cajas destempladas al visitante que venía a molestarle durante la oración. ¿Sabes qué misterio estaba meditando? La Visitación...
Hizo una pequeña pausa y dijo:
- Podemos leer los mejores libros de los místicos clásicos, pero si eso no nos lleva a enriquecer nuestra forma de orar, no sirve para nada. Podemos conocer profundamente las Escrituras, pero, si no cambian nuestra manera de vivir, la profundidad de nuestro ser, si este conocimiento no nos lleva a ver a Dios en el Otro, todo eso es inutil.
Lo miró con simpatía y concluyó:
- Lee y medita, pero aplícalo a tu vida. Y sobre todo, párate, y en vez de buscar tanto, detente en la soledad. Verás como Dios te encuentra a ti. Entonces se enriquecerá tu vida espiritual...
Y lo invitó a rezar Vísperas con él...
GRACIAS POR ESTA REFLEXIÓN.
ResponderEliminarJOAN JOSEP:
ResponderEliminarCreo que aunque a veces parece que Dios esté muy lejos, es nuestra Misión ir en su busca.
¡Que dificil y a la vez sencillo!. Si con un Padrenuestro ya nos acercamos a El.
Una abraçada, Montserrat
Hola, ola de mar...
ResponderEliminarJoan, echo de menos tus sabios consejos, nunca encontré una persona tan religiosa como tú tan tolerante con los pobres ateos como yo.
Una vez Diana, me dijo que entendía a veces no comprendía como no era creyente, y tras pasado el tiempo comprendió que mi espiritualidad era distinta y no menos elevada. Y por ello, me ocurre lo mismo que en otras espirtualidades, a veces no se aplicar lo que siento, pienso, la fe en la que vivo, formada por mis valores y creencias, por lo que creo correcto y honesto.
Es difícil buscar el equilibrio , mucho, entre loq eu el mundo pide, lo que queremos llegar a ser y lo que somos, y nos perdemos dando vueltas, yo ahora , ando perdida. Bueno, creo que siempre.
Un beso, del aire
Yo no rezo, pero soy caminante,y tengo una referencia;y me mantengo en mi sitio en las obligaciones que se tienen con los hijos y con los nietos.
ResponderEliminarSi no puedo salir ho viajar cuando quiero,eso es lo de menos:pues no pienso actuo esta es mi trinchera, y no puedo relajarme pues tengo que defenderla cada dia una abraçada
Parar, escuchar, ver a Dios en el Otro y dejarnos encontrar por Él...
ResponderEliminarEs una tarea complicada, pero cada vez me convenzo más de que es el único camino, leer, meditar, escuchar, algún día....
Por cierto hace muchísimo que no rezo Vísperas, hoy puede ser un buen día...
Un abrazo
Una vez más , me haces pensar.
ResponderEliminarNo rezo; escucho al Otro y me meto en sus zapatos.
No busco, pero, estoy atenta...
Volvía de hacer mi compra, ya sabes, en un sitio cercano; la seguridad de mi paso no me permite grandes distancias... volvia , respirando el perfume que dejan las tormentas de verano.... pensaba en las miles de veces que he pasado por el mismo sitio; lo repetido y cansino que puede llegar a ser un horizonte memorizado. Todo viejo, destartalado, quemado... todo con el inexorable paso de los años.... me miro hacia dentro... la misma huella que en exterior. Sonrio. ¡¡¡ hay que ver la importancia que nos damos ¡¡¡ tanto pensar en la muerte, en el fin, la necesidad de mantener una fuerza .... Joan , ¿ por qué no aceptar que todo se acaba y que lo único importante es la dignidad con la que hemos vivido? Me asusta la necesidad que tenemos de eternidades y premios.
Que noooooooooooooooo , que no estoy triste , ni depre ¡¡¡¡ que mañana ganamos y vamos a ser campeones ¡¡¡ eso si, quiero llegar de una forma serena y sensata.
Besitos, de ganadora.
Amigo Joan:
ResponderEliminarSiempre he pensado que la fuerza de la oracion, es precisamente la suerte de sentirse solo en un bis a bis, y en ese momento saber, que tan solo estas tu con Dios. Y en ese momento no existen los libros. Si no saber que siempre te has dejado algo para la proxima ORACION.
La vida es un camino de búsqueda hacia Dios...en el cual el mejor guía es Él, porque no nos abandona nunca cuando nos flaquean las fuerzas...y viaja hasta el final a nuestro lado...aunque a veces nos sintamos solos y con dudas.Un saludo.
ResponderEliminarGloria. La eternidad no es cuestión de premios o castigos...Después de 20 siglos de evangelio no hemos entendido el mensaje de Jesús y se guimos con la "justicia" humana. la del Talión, la del que la hace la paga...No la eternidad no tiene nada que ver con eso. Tras una vida honesta ( y todo hombre te dirá que ha sido más o menos honesto), llega el momento de unirnos a aquel que es el Todo, aquel que comprende lo que no comprendemos, aquel que es el Único...y ponle los calificativos que quieras. Nos quedamos cortos. Méritos...errores...Él conoce lo profundo de nosotros y se ríe de nuestros juicios y nos espera a TODOS con los brazos abiertos. (Nosotros seguiremos diciendo que esto es una gran injusticia...,pero es que nosotros no entendemos nada).
ResponderEliminarUn superabrazo de sábado: Joan Josep
Si, si entiendo. Por eso me enfado con Zorrilla y su Don Juan Tenorio. Cinco minutos de angustía y pedir perdón y , ale,,, todos juntos a la mesa ¡¡¡¡
ResponderEliminarJoan , te decía, el otro día y en un comen perdido, que "algo" me dice que las cosas son más sencillas de como las tenemos montadas... Quizás me equivoco, o te equivocas tú... ¿ crees que importa? ¿ Era una de tus entradas la que nos contaba que seriamos juzgados por el amor y no por los pecados acumulados ?
Te pido perdón ( con la boca pequeña) por hacerte escribir tanto. Siempre aclarando cosas a la niña ;) impertinente y respondona ....
Eso si, esa niña te quiere un montón y te abraza en esta tarde de sabado.