miércoles, 21 de octubre de 2009

EL ANACORETA Y LA CONVERSIÓN...


El joven inquieto volvió a hablar con el Anacoreta. Se le veía preocupado:

- Anacoreta. Soy un joven universitario, que he vivido toda clase de situaciones, lo he probado todo. Pero siento mi alma vacía; ya nada me llena. Por eso he buscado ayuda en personas que tras vivir una vida como la mía, se han convertido.

Una nube de tristeza cubrió sus ojos antes de proseguir:

- Se vanaglorian de su cambio y atacan cruelmente a los incrédulos, a sus compañeros de antes. Si encontrar a Dios significa esto...preferiría no encontrarlo. No sé. Estoy hecho un mar de dudas.

Sonrió el Anacoreta, tomó de la mano al joven, se sentaron en un baco y respondió.

- La conversión, aunque parezca algo súbito, es un proceso. Pablo, tras su caída en el desierto, pasó una larga temporada madurando lo que le había ocurrido. Lo que la gente entiende como conversión es sólo el principio del proceso.

Hizo una pausa mientras un anciano se sentaba a su lado en el banco y siguió:

- El principio es el descubrimiento, el encontrar a Dios y esa sensación de borrar todo lo anterior y seguir esa nueva luz con todas las fuerzas. Ahí encontrarás a muchos que se llaman conversos. En su ilusión, desprecian el pasado y con él a todos los que no han encontrado a Dios. Pero eso es sólo el principio de la conversión.

Miró a los ojos del joven y añadió:

- Ese converso que cree comerse el mundo, tarde o temprano volverá a caer, a negar a Dios en su conducta. Entonces descubrirá la primera realidad: Que lo importante no es que nosotros amamos a Dios, sino que Él, a pesar de todo, nos sigue amando. Y ahí empezamos a ver a Dios tal como Él es, no como yo quiero que sea.

Se detuvo y sonrió, viendo que el anciano, disimuladamente, se había acercado a ellos y escuchaba.

- Pero falta la verdadera conversión. Aparece la crisis. Desaparece el sentimiento. No notamos a Dios. Los místicos la llamaron "Noche oscura del alma". Se ve reflejada en esas cartas de Teresa de Calcuta al final de su vida...No siente a Dios. Ahí, el que sigue fiel, a pesar de que no siente nada, es el verdadero converso. Algunos, un día, reciben al consolación.

Volvió a mirar a los ojos del jóven antes de concluir:

- La conversión es un proceso que dura toda la vida...Es un recorrido continuo por el nacer y el renacer.

Se removió el anciano que estaba sentado junto a ellos y dijo:

- Perdonen que me meta en su conversación. Lo que usted acaba de decir es justamente lo que he vivido con mi mujer. Un día la conocí y fue como caerse del caballo. Era ella la que yo deseaba para mi. Nos casamos y así vivimos unos cuantos años. Hasta que empecé a descubrir sus defectos y empecé a serle infiel. Descubrí entonces, que lo que me seguía uniendo a ella no era mi amor, sino el que ella tenía por mi. Y así volví a amarla. Y luego llegó ese momento en que nada físico nos atraía el uno del otro, es más, empezaron las enfermedades. Pero entonces, aunque ya nada parecía unirnos, el amor que durante tantos años nos habíamos tenido nos unió y nos hizo amarnos de otra forma.

Rió el Anacoreta y dijo:

- Claro. Es que el Amor es Unico...El amor humano es imágen del divino...

6 comentarios:

  1. Lo importante es que Él nos sigue amando....
    qué impotante es eso con la de veces que nosotros "le negamos" o simplemente nos olvidamos de Él... Me quedo con esto para meditarlo esta noche, creo que me va a venir bien

    Un abrazo
    Soqui

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  2. Es el Amor de Dios fluyendo a través de nosotros cuando nos abandonamos a él. Mil gracias por tu blog y por la visita. Un abrazo y ¡mucha Luz!

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  3. Ocurre a veces que las palabras parecen dirigidas en especial para nosotros.Alguna que otra ocasión he comentado que mi fé es como el Guadiana..y aunque esto no sea realmente cierto ,ahora estoy en una de esas fases en que me siento mmás lejana.He dejado la catequesis que venia dando a los niños ,he dejado de pasar por la parroquia para la oración ..en fín ,que estoy un pco "descastada".Por eso leerte viene en este momento como anillo al dedo...
    Te dejo un abrazo..isa
    Gracias por pasarte por el espacio .El viaje a Cantabria fue estupendo ,he vuelto con una gran alegria interior..

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  4. Es curioso cómo a lo largo de la historia se repite esta postura de algunos "creyentes".Parecen poseer la verdad absoluta.Es soberbia que va lejos de la enseñanza de Jesús,porque yo creo,que ÉL nos ama a todos,creyentes o no,cada uno va hacia Él por un camino distinto(algo así decía León Felipe).
    UN Padre amante ,no puede negar al hijo,ni al presente ni al pródigo.
    Desde aquí ,un toque a los creyentes que "creen "ser los "llamados".No¡¡
    Dios es el Padre de todos.
    Besucos

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  5. Algunos nuevos conversos son como los que se acaban de quitar del tabaco; odian a los fumadores más que los no fumadores.
    La vida no es un caminos de rosas para nadie; y para algunos es un constante camino de zarzas. Quien persevere...
    Hasta Sta. Teresa dicen que llegó a decir a su amadísimo Jesús: "si tratas así a tus amigos, con razón tienes tan pocos".
    La conversión es un comienzo sin fín; un esfuerzo constante de luchar contra corriente; un dejarse llevar solo por el Espíritu de Dios..

    Un abrazo
    Pmartimor
    http://lavirgenmaria.spaces.live.com

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  6. Joan, Pablo me ha pisado el comenterio ... que le vamos hacer.
    En mi caso, creo, que estos nuevos conversos me alejan cada día más de lo que ellos defienden. Si es cierto que los padres amamos a todos nuestros hijos...aunque alguno nos haga la puñeta.
    Un beso muy fuerte

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