jueves, 11 de marzo de 2010

EL AMOR ES LO ÚNICO, LO VÁLIDO


Esta frase que he utilizado como título es del dominico José Fernández Moratiel (1936 - 2006). Los que asistieron a su "Escuela del Silencio" quedaron cambiados para siempre. José era un místico, de los de verdad, de aquellos que la unión con Dios les lleva a la verdadera unión con los hombres. En nuestro mundo sobra "religión" y falta espiritualidad. Es decir, sobra ideología y falta interioridad. Lo sé. Cuando se habla de la importancia del amor, de que, como dijo Juan de la Cruz, al final se nos juzgará del amor, unos dicen que eso son excusas para dejar los mandamientos, los ritos, las obligaciones eclesiásticas de lado, y otros dirán que eso es refugiarse en uno mismo y olvidarse de las necesidades y de liberar al hombre. Sí. existen esos dos peligros. Pero el que llega al amor a través del silencio, por medio de la contemplación, descubre la importancia de amar a Dios y descubre que la forma concreta de servirlo es sirviendo a los Hombres: porque Él está Encarnado en los hombres y es allí donde lo encontramos materialmente, tras descubrirlo espiritualmente en la oración.

Os dejo aquí un texto precioso de José Fernández Moratiel:

"El amor es lo único, lo válido.

Al escuchar esto uno puede experimentar cierto temblor, pero es maravilloso que sea el amor el que nos juzgue. La verdad es que Jesús no ha venido a este mundo, no se ha encarnado para meter miedo al hombre, sino para despertar en él la confianza y la esperanza.

El amor todo lo abraza, todo lo limpia, el amor todo lo disculpa y perdona, el amor todo lo comprende.

El amor no sabe condenar.

Da confianza que Dios es puro amor, es Él quien nos va a abrir las puertas de la vida.

No tengas miedo que sea el amor el que te mire, Él todo lo cura, todo lo hace renacer.

Es una dicha creer en el amor.

El amor no espera que le demos nada , no tenemos que merecerlo, se da gratuitamente."

A mí me da una pena tremenda leer que palabras así sólo son una excusa para no comprometerse...Es no haber entendido nada. Podemos ser laicos, sacerdotes en una parroquia, sacerdotes dedicados a los marginados, sacerdotes de la Curia romana, Obispos, religiosos contemplativos, religiosos activos...Eso no son más que circunstancias. Si no es el amor, ese amor recogido en el silencio y la meditación, el que llena nuestros corazones...No somos nada. El día que entendamos esto, dejaremos de descalificarnos unos a otros y nos uniremos en el Único Amor de quién se abajó (kénosis) hasta hacerse nada, como uno de nosotros.


8 comentarios:

  1. Pues yo lo veo al contrario. Palabras así son las que más compromiso requieren y quien es capaz de sentir ese Amor y expresarlo hacia los demás se vuelve "esclavo" de ese amor. Su única opción es SERVIR.

    Un Abrazo Joan y tranquilo, no me siento abandonada. Todos andamos muy atareados, yo también estoy un poco fuera de juego. Otro abrazo.

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  2. Dice San Juan que Dios es amor y cuando amamos Dios está presente entre nosotros.La única manera de hacer creible el mensaje cristiano,precisamente consiste en eso en mostrar la naturaleza divina que es el amor,porque el que dice que ama a Dios al que no ve ,y no ama a hermano al que ve es un mentiroso.En 2ªCorintios,13 lo tenemos claro que todo pasará y aunque hicieramos milagros si no tenemos amor no somos nada.
    Asi que a lo práctico...
    Un abrazo.

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  3. Hace algunos años asistí a un retiro de silencio que hizo aquí en Sevilla, me encantó.
    El amor a mi entender es el motor que nos lleva a darnos, a compartirnos, a empatizar con la creación.
    El mayor amor nos lo ha dado Dios al encarnarse y dasr su vida.
    Un abrazo y te ragalo una sonrisa.

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  4. ¡Qué bálsamo tus palabras! También así lo estoy experimentando yo, y junto a la alegría que me produce el encuentro -personal y único- con el Amor de Dios, siento una pequeña tristeza: conozco personalmente en la Iglesia muchas personas que han hecho del "compromiso" su ley, y se miden -y miden a los demás- por la cantidad de obras y el número de pobres a quienes llegan. Los veo angustiados, crispados y resentidos. ¿Dónde está la alegría del cristiano... la inmensa alegría de habernos encontrado con Jesús?. Si perdemos el norte -que es nuestro encuentro diario con Él, que es quien nos da fortaleza- lo perdemos todo. Un abrazo y gracias por tus palabras.

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  5. Joan,el caso es que nos pasamos al vida juzgando lo que otros hacen y no prestamos tiempo a nuestro trabajo como personas entregadas a los demás sin pensar si está bien o no lo está.
    OLvidemos las críticas y hagamos el apostolado sin mirar a ningún lado.
    Los que se pierden en el "qué dirán los otros",dudan de su propia misión.

    Los contemplativos tienen una paz y seguridad interior que para mí la quisiera yo¡¡
    Besucos amiguco y ..paciencia con los "acusadores"¡¡

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  6. El hombre maduro, ante un pensamiento diferente, hace caso omiso o lo rebate de forma razonada. El adolescente se siente atacado, chilla, patalea, agrede e insulta. "angustiados, crispados y resentidos. ¿Dónde está la alegría del cristiano...". Que bien le van conociendo sus comentaristas. Porque crispado lo está usted y mucho. A la paz de Dios, hermano.

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  7. Me gusta Moratiel, pongo con frecuencia frases suyas y quizás sea la necesidad de silencio lo que me hizo acercarme a él y a sus escritos
    El texto que has puesto me parece precioso y es para meditarlo despacio todo él, me quedo con la tercera frase:
    "Da confianza que Dios es puro Amor, es Él quien nos va a abrir las puertas de la vida"

    Un abrazo

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  8. Al besar un Cristo, con el rostro de nuestro enemigo, nos envolverá una voz cálida y musical, paternal y bondadosa. Aquélla que hace muchos siglos nos dejara la más grande y maravillosa herencia que hombre alguno pueda tener, encerrada en sólo seis sencillas palabras: “Amaos los unos a los otros”.

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