miércoles, 13 de noviembre de 2019

SALVADOS POR LA FE


"En su camino a Jerusalén, pasó Jesús entre las regiones de Samaria y Galilea. Al llegar a cierta aldea le salieron al encuentro diez hombres enfermos de lepra, que desde lejos gritaban:
– ¡Jesús, Maestro, ten compasión de nosotros!
Al verlos, Jesús les dijo:
– Id a presentaros a los sacerdotes. 
Mientras iban, quedaron limpios de su enfermedad. Uno de ellos, al verse sanado, regresó alabando a Dios a grandes voces, y se inclinó hasta el suelo ante Jesús para darle las gracias. Este hombre era de Samaria. Jesús dijo:
– ¿Acaso no son diez los que quedaron limpios de su enfermedad? ¿Dónde están los otros nueve? ¿Únicamente este extranjero ha vuelto para alabar a Dios?
Y dijo al hombre:
– Levántate y vete. Por tu fe has sido sanado." 

El evangelio, como en la parábola del Buen Samaritano, nos pone de ejemplo alguien que no era aceptado por Israel: un "enemigo". Jesús, el Amor de Dios, está por encima de nuestras clasificaciones, de las razas, incluso de las religiones. Es la Fe, la verdadera, la que es entrega, la que nos salva.
"Hace algunos años me sucedió un episodio, llegando a la ciudad luego de un viaje relativamente largo, el automóvil se descompuso y quedé varado ya entrada la noche. Realmente de mecánica automotriz tengo pocos conocimientos por no decir ninguno. Cuando estaba en ese impase un auto se estaciona cerca, se baja un hombre de rostro huraño, que en un santiamén identificó la falla y, por supuesto, compuso el auto. Yo no sabía cómo agradecerle la ayuda tan valiosa y oportuna, pero el hombre desapareció de la misma manera como llegó. Son las lecciones de la vida. Sentí una necesidad de agradecer a Dios por la ayuda oportuna de aquella persona y de estrechar agradecido la mano del hombre. Dar gracias, más que un sentimiento, es un valor profundo, vital del ser humano. Lamentablemente la sociedad mercantil y consumista que nos toca vivir ha ido deteriorando valores como la gratitud, la gratuidad y generosidad. Tendemos a actuar por interés, no por generosidad. ¿Cultivas el valor de la gratitud y la generosidad en tu ambiente?" (Koinonía) 

1 comentario:

  1. "...- Jesús, mestre, tingues pietat de nosaltres!
    A l'veure'ls, Jesús els digué:
    - Aneu a presentar-vos als sacerdots.
    Mentre anaven, van quedar purs. Un d'ells, a l'veure guarit, va tornar enrere glorificant Déu amb grans crits, i es va inclinar fins a terra davant Jesús per donar-li les gràcies. Aquest home era de Samaria. Jesús va dir:
    - És que no són deu els que van quedar purs? On són els altres nou? ¿Únicament aquest estranger ha tornat per lloar Déu?
    I va dir a l'home:
    - Aixeca't i vés-te'n. Per la teva fe t'ha curat. "

    Lamentablement la societat mercantil i consumista que ens toca viure ha anat deteriorant valors com la gratitud, la gratuïtat i generositat. Tendim a actuar per interès, no per generositat. ¿Cultives el valor de la gratitud i la generositat en el teu ambient?

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