jueves, 1 de agosto de 2019

ESCOGER


"Puede compararse también el reino de los cielos a una red echada al mar, que recoge toda clase de peces. Cuando la red está llena, los pescadores la arrastran a la orilla y se sientan a escoger los peces: ponen los buenos en canastas y tiran los malos. Así sucederá al fin del mundo: saldrán los ángeles a separar a los malos de los buenos, y arrojarán a los malos al horno encendido, donde llorarán y les rechinarán los dientes.
Jesús preguntó:
– ¿Entendéis todo esto?
– Sí, Señor – contestaron ellos.
Entonces Jesús añadió:
– Cuando un maestro de la ley está instruido acerca del reino de los cielos, se parece a un padre de familia que de lo que tiene guardado saca cosas nuevas y cosas viejas. 
Cuando Jesús terminó de contar estas parábolas se fue de allí
Vivimos en una sociedad que todo lo clasifica. Buenos y malos. Feos y guapos. Divertidos y aburridos. Inteligentes y estúpidos...Y nos olvidamos de lo más importante: saber quienes somos nosotros. No somos nadie para juzgar a los demás. Sí para juzgarnos a nosotros.  Se trata de mirar en nuestro interior y escoger lo nuevo y lo antiguo. Aquello que os hace crecer en cada momento. Aquello que nos une a Dios.
"Esta parábola es semejante a la de ayer sobre el trigo y la cizaña que crecen juntos. Aquí se trata de peces y en ambos casos es la invitación a todos, buenos y malos, a participar del reino, aunque la clave está en cómo se vive. A Dios, el día del juicio, corresponde hacer la separación entre unos y otros. Jesús nos ofrece la posibilidad de participar de una vida plena. El reino de los cielos es un regalo valioso que se nos ha ofrecido y merece por lo mismo una respuesta de acogida. Por esta razón el evangelio termina recordando la importancia de fomentar la virtud del discernimiento para saber lo que hay de valor y lo que hay de inútil en nuestra vida. También podríamos aplicarlo a la misma Palabra donde el Antiguo como el Nuevo Testamento nos ofrecen su sabiduría y es importante primero entenderlo y segundo aplicarlo. ¿Eres de los que dice: ¡Señor, Señor! pero no cumples la voluntad de tu Padre que está en los cielos?" (Koinonía) 

2 comentarios:

  1. "...I ens oblidem d'allò més important: saber qui som nosaltres. No som ningú per jutjar els altres..."

    Retrovar-se amb un mateix, i... relligar el SER. (amb l'entorn en el qual caminem. Sinó...fem les coses "a la carta" (Ll.Duch, "L'Exili de Déu")

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  2. Sonrió....quien sería yo para decidir los que son grandes y los que son pequeños..... Como madre y creadora ( en una pequeña parte) de personas jamás podría "tirar" a ninguno....a aberrante me suena eso.

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