miércoles, 23 de diciembre de 2009

LA MANO DE DIOS...


"A Isabel se le cumplió el tiempo y dio a luz un hijo. Se enteraron sus vecinos y parientes de que el Señor le había hecho una gran misericordia y la felicitaban. A los ocho días fueron a circuncidar al niño, y lo llamaban Zacarías, como a su padre. La madre intervino diciendo: '¡No! Se va a llamar Juan'. Le replicaron: 'ninguno de tus parientes se llama así'. Entonces preguntaban por señas al padre cómo quería que se llamase. Él pidió una tablilla y escribió: 'Juan es su nombre'. Todos se quedaron extrañados. Inmediatamente se le soltó la boca y la lengua y empezó a hablar bediciendo a Dios. Los vecinos quedaron sobrecogidos, y corrió la noticia por toda la montaña de Judea. Y todos los que lo oían reflexionaban diciendo. '¿Qué va a ser este niño?'. Porque la mano de Dios estaba con él."

Dice el texto que la mano de Dios estaba con Juan. Tenía que ser sacerdote, pero la mano de Dios lo llevó al desierto. Debía haberse llamado Zacarías como su padre o cualquier otro nombre de la familia, y lo llamaron Juan, que significa: "Dios es compasivo","Dios nos ayuda".


La mano de Dios, la misma que todos tenemos sobre nosotros para guiarnos en la vida, ayudarnos en la oscuridad, consolarnos en nuestras penas...Isabel y Zacarías eran conscientes de esa mano. Nosotros, la mayoría de las veces, no. Cierto que a veces reparamos en que nos sucede algo en la vida, que no tiene sentido sin esa mano. Lo corriente es que no pensemos en ella o que la convirtamos en una superstición. ¿Que son si no, todas esas cadenas que nos envían por internet prometiéndonos grandes bendiciones o grandes catástrofes si la rompemos?


La mano de Dios es suave, imperceptible...Sólo se ve con los ojos de la Fe. Sólo reparamos en ella en el silecio y la oración. No es una mano que golpea y castiga. Es una mano misericordiosa, tendida hacia nosotros para que nos agarremos a ella...




4 comentarios:

  1. Y qué difícil resulta verla algunas veces, ¿o será que hay momentos en que "no queremos verla...?"

    Un abrazo desde este tiempo de espera

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  2. Hay entradas que, por razones obvias, es imposible que pueda comentar nada. Sin embargo quiero que sepas que me encanta pasar estos dias por tu casa y leer "citas del evangelio" -¿se dice así?- y tu reflexión al respecto.

    Gracias Joan. Feliz dia.. hoy con bastante menos frío, por fortuna para mi ¡je! :-P

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  3. Joan , casi rompo en una carcajada ¡¡¡ Perdoname . ¿ Y dices que es una mano suave ? jajajaja , lo siento , no es falta de respeto , de veras , es que me vienen a la memoria ciertos golpes que .... coñe , estoy sin dientes ¡¡¡ Un besooooooooooooo , prefiero creer que alguna vez , se le va la mano ¡¡¡
    Tenemos que hablar ¡¡¡¡¡¡

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  4. Gloria. Eso ya se lo dijo Santa Teresa: "Señor, si así tratas a tus amigos, no me extraña que tengas tan pocos." Un abrazo: Joan Josep

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